Homenaje póstumo al mejor pelotari Vizcaíno 
de Elorrio, Hilario Azkarate, conquistó 
6 txapelas de Campeonato-manomanista, 
entre los años (1960-1968)

El pelotari Vizkaíno de Elorrio, luciendo su primera txapela, de Campeón-manomanista 

al vencer en la final al Ciclón-Alavés, José Mª Palacios (Ogueta) en  el año 1960,
en el frontón Astelena-Eibarrés

José Mª Palacios (Ogueta) impòniendo una insignia al Campeón-manomanista, Hilario Azcarate

Dos grandes Campeones-manomanistas, que suman  6 txapelas cada uno, un total de 12 txapelas, 

a la izda, el navarro, Juan Ignacio Retegi (Retegi I) y el Vizkaíno, Hilario Azcarate

Fotografía de la final del Campeonato-manomanista entre el Campeón Hilario Azcarate,  y el aspirante el Guipuzcoano de Azkoitia, Luciano Juaristi (Atano X) en el año 1965, en el frontón Anoeta Donostiarra.

Hilario Azcarate, conquistó su sexta txapela de Campeón-manomanista, 

frente a Luciano Juaristi (Atano X) año 1967

Frontón Astelena de Eibar 13 de Junio de 1960

Hilario Azcarate Lupiola, nació en Elorrio-Vizkaia el 9 de Agosto de 1935, debutó el año 1957 en el frontón Astelena-Eibarrés.

El Vizcaíno de Elorrio, Hilario Azcarate, es el nuevo Campeón-manomanista al vencer en la final al Ciclón Alavés José Mª Palacios (Ogueta).

Con un calor sofocante. En la caldera del Astelena se sobrepasan los (30 grados), hay un clima más caluroso aún de optimismo en las filas del Campeón. En la víspera de la final se ofrecen (100 a 30) en contra de Hilario Azcarate.

El inteligente casero de Elorrio no hace nada por evitar esa “psicosis”. Digan ustedes que ganará Ogueta, declara a los periodistas. “Con hacer unos tantos me conformo” añade cauteloso. Para incrementar la clara tendencia Ogueta hace los cinco primeros tantos. La “cátedra” tira el dinero con momios de (200 a 22).

Pero Hilario Azcarate, no es tan obediente cordero como muchos piensan y el “Ciclón” excesivamente confiado ha dejado en casa sus mejores armas. Con la mano derecha no goza y sólo en contadas ocasiones enseña su poderosa izquierda. Hay empates a 7, 8 y 9, el de Elorrio se coloca por delante en el marcador 13-9. Nuevos empates a 14, 16, 17, 18 y 19. Únicamente en el tanto 19-18, se ha pronunciado la “cátedra” a favor de Azcarate.

El tanto 20 lo gana el vizcaíno por fallo de Ogueta el 21 de saque y el 22 tras un largo peloteo al tirar al suelo la pelota Ogueta. La gran sorpresa se ha consumado. Jamás en una final ha habido favorito tan claro y un resultado tan inesperado. Ogueta se ha presentado mal preparado, y muy justo de fuerzas.

Nada menos que 17, fallos se le contabilizaron al Ciclón-Alavés. El cronista de pelota Ezquiaga, resume. “Ha regalado el partido", Aitona, recuerda lo del estudiante listo pero sin constancia, confiando en sus propias fuerzas, deja para el final el repasar las lecciones con vistas al examen y suspende”

Hilario Azcarate además fue menospreciado, incluso después del Titulo conseguido pocos reconocieron sus virtudes. Su estilo tosco y feo, su apariencia sencilla, su

Escondida izquierda, resultó un misterio para muchos aficionados que vieron en el de Elorrio al Campeón de la casualidad, el Campeon-manomanista de un día.

Luego resultó que conquistó (6 txapelas) del Campeonato-manomanista, y su temple, inteligencia y eficacia, como el sota mano y la fácil dejada ganaron el corazón de los críticos. 
Pero en aquella ocasión pareció que sonaba la flauta por casualidad y la verdad es que José Mª  Palacios Moraza, fue una caricatura. 

Las seis txapelas de Hilario Azarate las conquisto frente a grandes Campeones del manomanista. Ogueta, 1960, Etxabe X 1961, Jesús García Ariño I, 1962 y 1964,  Luciano Juaristi (Atano X), 1965 y 1967.